La txapela tiene un rabito en el centro con punta hacia arriba conocido en euskera como “txertena”
El motivo real de la presencia del rabito o txertena en las boinas tiene que ver con razones propias de su confección. La boina se teje en telares y se consigue su forma redonda a partir de una sucesión de tejidos de punto de lana en forma de triángulos isósceles que se unen unos a otros por sus lados más largos. Esta técnica de confección textil plantea una dificultad, y es que en el centro del círculo el tejido queda sin rematar. Ahí es donde aparece la función del rabito o txertena que es con el que se consigue la base de sustentación para la costura de los vértices o puntas de los triángulos. De esta forma, el tejido circular de lana, que es la base del proceso de fabricación de la boina, quedará perfectamente cerrado y rematado por todos sus lados.
Cuando elaboramos nuestras txapelas personalizadas en algunos diseños es necesario bordar el centro de la txapela donde está el rabillo de la misma. En estos casos, lo que debe hacerse es “capar la boina” provisionalmente, es decir, cortar el rabito para poder hacer el bordado en esa zona. Pero luego, siempre, se debe volver a coser el mismo en la posición en la que estaba. Un acabado auténticamente profesional exige que nunca falte el rabito de la txapela bordada.
